Martin Scorsese

Su asma le impidió llevar a cabo muchas actividades propias de un niño, como por ejemplo el deporte. Así que desde muy pequeño Scorsese tuvo que pasar largas épocas en casa, leyendo, mirando por la ventana y yendo al cine, donde despertó su amor por el séptimo arte.

En un principio su idea fue convertirse en cura y hasta llegó a ingresar en el seminario de la Cathedral College. Pero finalmente se decantó por los estudios de cine matriculándose en la escuela de cine de la Universidad de Nueva York.

Durante sus años en este centro empezó a realizar cortometrajes, pero no sería hasta 1968 que dirigiría su primer largometraje, el drama ¿Quién llama a mi puerta?, protagonizado por Harvey Keitel.

Años más tarde se involucraría en Malas calles (1973) la cual fue su primera gran película y la primera de muchas otras colaboraciones con el actor Robert de Niro, quien protagonizará con posterioridad títulos como Taxi Driver (1976) o New York, New York (1977), film en el que aparecía Liza Minnelli, actriz con la que el director mantendría un breve romance.

Poco a poco Scorsese fue tomando un estilo propio e indudablemente una marca de la casa.

Así pues otros de sus éxitos fueron: Alicia ya no vive aquí (1974), Taxi Driver (1976) y Toro salvaje (1980), uno de sus trabajos más ambiciosos.

Muchas de sus creaciones le valieron nominaciones a los premios de la Academia, como por ejemplo La última tentación de Cristo, Uno de los nuestros, La edad de la inocencia o El Aviador. Pero finalmente fue Infiltrados el film que le proporcionó la ansiada estatuilla.

Por otra lado Scorsese también se ha dedicado a la producción, fundando la Film Foundation, una entidad que promueve la restauración de films por parte de archivos y estudios.

También dirigió el videoclip "Bad" de Michael Jackson. Sus películas favoritas son: Ciudadano Kane (1941), Red Shoes (1948) y Gattopardo