Anita Ekberg

Anita Marianne Ekberg, conocida como Anita Ekberg, fue una de las actrices más bellas de la historia del cine. De hecho, tras alzarse como “Miss Suecia” a los 19 años, esta mujer nórdica participó en el año 1950 en el certamen de “Miss Universo”.

Como no podía ser de otra manera, su espectacular físico llamó la atención del mundo entero y, cómo no, de los productores de cine de Hollywood, que corrieron a por Anita, para ofrecerles suculentos contratos.

Así las cosas, Ekberg debutó a principios de la década de los 50 en ‘Abbott And Costello Go to Mars’, una película dirigida por Charles Lameont y con la pareja cómica formada por Bud Abbott y Lou Costello encabezando el reparto.

Su papel fue breve, pero suficiente para dejar huella en el público masculino; que, en esa misma década podría disfrutar de Anita Ekberg en multitud de cintas, como ‘La espada de Damasco’ (de Nathan Duran), ‘El caballero del Mississippi’ (dirigida por Rudolph Maté), ‘Take Me To Town’ (por Douglas Sirk) o, entre otras, las comedias de Frank Tashlin ‘Artistas y modelos’ y ‘Loco por Anita’.

Muchos de sus papeles más exitosos tendrían también lugar en los 50, participando desde 1956 a 1959 en títulos como ‘Guerra y Paz’, ‘Zarak’, ‘Paris Holiday’ o la italiana ‘Bajo el signo de Roma’, orquestada por Guido Brignone.

Asimismo, durante los sesenta firmaría algunas de sus mejores interpretaciones, como aquel por el que Anita Ekberg será siempre recordada: el de Sylvia en ‘La Dolce Vita’. La dirección de Federico Fellini y la mítica escena del baño de la rubia en la Fontana di Trevi elevaron en 1960 esta película al status de clásico en el mismo momento de su estreno.

‘Los mongoles’, ‘Bocaccio 70’, ‘El amo de la selva’, ‘Un chalado en órbita’ o ‘Detective con rubia’ son otros de los largometrajes que contaron con Anita Ekberg en su reparto en esta época de máximo esplendor de la intérprete.

A lo largo de su carrera, la sueca destacó también como modelo, vestida y sin vestir, ya que protagonizó varios desnudos totales para la revista masculina Playboy. Además, se prodigó en los platós de televisión, participando en varios telefilmes y programas.

Aunque nunca tuvo hijos, Anita Ekberg fue objeto de deseo de multitud de estrellas cinematográficas y otros tantos millones de mortales. Entre sus conquistas atribuidas se encuentran Frank Sinatra, Gary Cooper o el mismísimo Marcelo Mastroianni. Anita pasó dos veces por la vicaría. La primera con un actor inglés llamado Anthony Steel y la segunda con el intérprete Rik Van Nutter.