Gene Wilder

Gene Wilder se licenció en Bellas Artes por la Universidad de Iowa y decidió adentrarse en el mundo de la interpretación a través del teatro. Se hizo popular en Broadway, llegando a participar junto a Kirk Douglas en Alguien voló sobre el nido del cuco. En 1963, durante unos ensayos, conoció a Anne Bancroft, que por aquel entonces salía con Mel Brooks. Actor y director entablaron una relación que resultaría muy provechosa.

El debut cinematográfico de Wilder se produjo en una película alejada de sus futuras comedias: Bonnie and Clyde (1967), donde encarnó un secundario pero importante personaje. Al año siguiente se concretó su relación con Mel Brooks en Los productores (1968), uno de los mejores musicales de la historia, por el que Wilder fue nominado al Oscar al mejor actor secundario. Gene y Mel también colaboraron juntos en Sillas de montar calientes y El jovencito Frankenstein, parodia del film de terror que les valió la nominación al Oscar al mejor guión adaptado.

El currículum de Gene Wilder incluye dos nominaciones al Globo de Oro, una por su interpretación de Willy Wonka en Un mundo de fantasía (1972) y otra por la comedia El expreso de Chicago (1977). A pesar de que no se llevaba bien con el humorista Richard Pryor porque "la cocaína le volvía antipático", colaboró con él en films de menor interés pero de grandes taquillazos, como Locos de remate (1980). Además, Wilder dirigió cinco películas sin mucho acierto. La más conocida fue La mujer de rojo (1984).

Tras varios años sin noticias suyas, en 2003 ganó un Emmy por un trabajo en la serie Will y Grace. Vive en Stamford (Connecticut) y ha publicado una autobiografía en la que describe cómo ha sido capaz de superar un cáncer. Se sigue declarando demócrata y, al igual que ya hiciera con la guerra del Vietnam, ha censurado la actitud de Estados Unidos respecto a Irak.