Milla Jovovich

Hija de un doctor serbio y una discreta actriz ucraniana llamada Galina Loginova, Milla Jovovich es una de las heroínas de acción del cine moderno. Tanto ella como su familia tuvieron que hacer un traslado forzoso a Los Ángeles desde su Kiev natal por motivos políticos (aún estaba vigente el régimen de la Unión Soviética), incluyendo una breve estancia en Londres.

"No hay mal que por bien no venga", debió pensar su madre. Ya que estaban en Los Ángeles, Milla podía seguir sus pasos y convertirse en actriz. Así que la instó a que probara fortuna en Hollywood, pero las cosas no le fueron demasiado bien. A ello se le sumó un fracaso matrimonial y una crisis existencial que impulsó a Milla a regresar, sola, a Londres, donde lanzó un disco que vendió más de 200.000 copias en todo el mundo.

Pero de nuevo surgieron los problemas: su padre fue condenado a 20 años de cárcel por blanquear dinero para la mafia rusa, y Milla decidió volver con su madre a Los Ángeles y retomar su carrera de modelo con el único objetivo de ganar dinero. Quien la rescató de esa indiferencia fue el director Luc Besson, que a pesar de las críticas la fichó para El quinto elemento (1997), film que catapultó a la fama a Jovovich al compartir reparto con Bruce Willis.

Tras repetir con Besson en Juana de Arco (1999), a Jovovich le llegó el papel de su vida: el de Alice en Resident Evil, una cinta de acción futurista que la consolidó como heroína del nuevo siglo y musa de muchos fans que pidieron, con éxito, dos secuelas más que se estrenaron en 2004 y 2007. Otra película que la encasilló en ese rol fue Ultravioleta (2006).

Además de ser una cotizada actriz de Hollywood, Jovovich también ha seguido con su carrera como modelo y ha cedido su imagen a las más importantes compañías de cosméticos del planeta. En 2007, a los 32 años, tuvo a su primera hija, Ever Anderson, fruto de su relación con el director Paul W. S. Anderson, al que conoció durante el rodaje de la segunda parte de Resident Evil.